Historia

El Colegio Público Joaquín Costa de Graus, los sueños de una reforma pedagógica en el primer tercio del siglo XX

Extracto del artículo escrito para nuestro centro por el periodista Ángel Gayúbar. 


Es todavía hoy una de las insignias urbanísticas en el caserío local y ha salvado con mucho decoro sus más de ochenta años de historia. El Colegio Público Joaquín Costa grausino se inauguraba con gran solemnidad un 16 de septiembre de 1934, como rezaba la propaganda de la época, “a la memoria y en homenaje al sabio y patriota nunca bastante llorado, Dn. Joaquín Costa».

Redondeando la cifra, se informaba entonces que el edificio tuvo un coste de 300.000 pesetas y que había sido llevado a la realidad por el constructor Guzmán Moya, que construyó un edificio para escuelas graduadas, con cuatro secciones para niños y cuatro para niñas. Se compartían determinadas zonas comunes como el comedor, la cocina o la biblioteca, y tenían entradas independientes.

Tuvo originalmente dos pisos y posteriormente se le sumó un tercero que, con certeza, ya había sido previsto originalmente. También se añadieron dos pequeños edificios separados dedicados a vivienda de los maestros.

Atendiendo a la legislación vigente y a las instrucciones técnico-higiénicas de la época, las escuelas se emplazaban en lugares sanos y soleados, de fácil acceso, y con la debida orientación en función de las condiciones climatológicas de cada localidad. Así, en las regiones cálidas, la fachada principal se orientaba al Norte y en las frías al Sur. Se ubicaban en extensos terrenos, cuya superficie dependía fundamentalmente de la cifra de población infantil.

Las dependencias de una escuela incluían: vestíbulo, guardarropa, clase, despacho para el maestro, biblioteca, almacén para material de enseñanza, lavabos, porche cubierto (para los días de lluvia o de exceso frío) y campo escolar (que acercaba al niño a la naturaleza a través del esparcimiento al aire libre). Los lavabos y aseos, en el caso de Graus, estaban comprendidos en el edificio.

Su sistema de construcción tomaba como referencia los materiales empleados en cada localidad, de allí la utilización de la mampostería y el adobe omnipresente en la construcción grausina.